El
egoísmo lleva que todo lo que quieras este más allá, más allá de todos, pero
cerca de vos.
El
egoísmo siempre a alguien, le quita felicidad. Es
el miedo de no querer ver lo que tenias, en manos de otros. Es la frustración
de no lograr lo que otro si puede.
Es
como una ecuación: sacando el egoísmo, multiplicas felicidad. Quizá no la tuya,
pero si la de otro.
Quedate
si queres hacerme feliz. Quedate si realmente queres.
No
te quedes por el miedo de ver que otro puede tener lo que vos tenias, y lo que
realmente no te interesó nunca.
Quedate
si me amas, no si te gusta como sos vos cuando esta mi presencia.
Porque acá
es fácil quedarse cómodamente, pero la que no es feliz, soy yo.
Que
sea amor, no miedo. Que sea felicidad, no desperdicio.
Si no hay amor, que no haya nada entonces.