...

Le converso a mis sueños de vos.


Hoy me sonríen nuevas ilusiones, no más máscaras, quiero mas verdades en mi realidad. Todo parece mejorar, todo parece equilibrarse, la calma forma parte de mis días, mi vida parece mas viva.
Ya no hay dolor, no hay recuerdos, no hay un vos, un te necesito.
No quiero derrumbarme, no quiero romperme por una desilusión.
Caminar despacio sobre un suelo no firme, todavía. Para encontrar las trampas que puede esconder, hasta llegar al final, y descubrir, que nunca me soltarías la mano.
Y si no es mi oportunidad, las chances nunca acaban, hoy no, pero mañana comenzaría de nuevo.
Nunca me quedo en el mismo lugar.

Después de malos tiempos, sin suerte, llorando sin razón, riendo con temor, vuelvo a mi equilibrio, vuelvo a sentir intensamente. Qué reconfortante volver a sentir algo difícil de explicar, una ilusión, una vista figurada al futuro para encontrar buenas sensaciones. Sí, hay miedo, resentimiento, hay caídas que dejaron marcas. Pero es como si todo eso, se borrara por un momento, recordar que soy más, recordar que siempre hay un nuevo comienzo, una nueva historia para vivir. Y pensando en no regalar lágrimas y desperdiciar más tiempo, tengo fe de que quizá tenga un golpe, pero esta vez de suerte. Terminó todo lo que creía interminable, empezó todo diferente, tal como quería, sin pedir nada a cambio. Encontré una ilusión para volver a sonreír.
Recordar que puede haber otro: había una vez…
 
 
 
Pensé que fue un sueño, o un cuento mal contado, algo pasajero que no volvería a meterse en mi vida. Fueron horas, fueron días, los peores por cierto. El peor dolor, las lágrimas mas inmensas, la confianza se perdió para mi misma, la calma ya no era calma, y mi miedo era grande como mis ganas de desaparecer por un rato. Pero paso, y se está terminando. Me toco vivir algo que nunca imagine, pelear por mi propia vida y que eso, sea lo peor de mi vida, y lo mejor para ver todo lo que puedo conseguir, por que cosas la tengo que luchar, no tirar la toalla y remar. Que nada es tan largo como parece, todo tiene su destino, todo tiene su punto final. Llegar a lo más alto, volar a lo más lejano, sentir las manos en el cielo para volver a creer en vos mismo. Y si las cosas no parecen salir bien, siempre hay tiempos mejores. Aprendí que vivís, como morís, como respiras, como amas, con la misma intensidad sin darse cuenta, sin valorarlo, sin pensar que pasa el tiempo llevándose las oportunidades. Vamos Mica, todo pasa, pasaste lo peor y esto, lo que queda es el final, y sabes qué? Un final feliz.

Tu manera de quererme o de perderme? Tu forma de sacarme de tus miedos o de sentirme para luego dejarme? Solamente busqué conocerte, sacarte los miedos, echarte mi suerte. Mirar las estrellas, que no importe el mañana, que sea hoy el que valga, que me cede la calma. Pero encontré seguir un hilo, que mi corazón aceptó. Como pistas a lo incierto, como una botella al mar. Y el destino no lo veo, no veo su final. Pero el mar da poca vida ya, quiere desistir a quedar. Pretende dejar de querer, y empezar a entender, que es tu manera de querer. No me tengas miedo, yo no pienso en morder tus sueños. Quiero curar tus heridas, sanar tus cicatrices imponiendo locura.
Mi vida marchará, trotará, correrá también. Es imparable, indomable. Pienso triunfos para hacerlos, pero no puedo caer en tu infierno con el precio de sufrirte.
Me agoté de pensar, me canse de esperar. Quizá nunca te dije cuanto te espero, cuanto quisiera que algún día me mires con verdad. Pero la vida es como es, si no te lo da, por algo es, no me corresponde, no me quiere, me asesina.
Perdón por no rogar amor. Mi corazón por no hablar, sufrió más de la cuenta.
Y por última vez, me resisto a tu presencia, me aniquila la secuencia de mis sentimientos quebrantados, asustados, casi nulos.
Perdón por no demostrarte quién soy, quizá, quién sabe… te hubieras quedado.

Licencia de Creative Commons
Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 España