...

Ya se que no me animo a soltarte. Admito mi sensibilidad, admito mi poca fuerza para seguir después de conocerte.
No aprendo tan fácil a caminar sola y perder la costumbre.
El problema fue que hubo demasiada historia y poco tiempo.
 Acostumbrarme a vos, a tus palabras, a tus manos, tus te quiero pero no quiero. No quiero? Si, no quiero. No querer arriesgar y repetir historias. No querer animarse a sentir. Pero lamento decir que no puedo luchar contra la corriente, no puedo pelear y quedarme sin fuerzas, yo espero, yo quiero, yo puedo, pero me agota la misma desconfianza.
A veces cuelgo la mirada del techo, pienso y se me cae un pedazo de cielo que creí tener. Pienso en que el adiós puede ser hoy, mañana o en tiempo, pero hay adiós y eso me inunda, me pega el nudo en la garganta.
No voy a vivir en intermitencia, solo por quererte.
Si hay que decir basta, pondré mi poca voluntad para hacerlo, no quiero llorar. Para vos es un juego que se juega para empatar y salir sin perder nada, para mí es más que eso, es más que momentos sueltos.
No pretendo que valores lo que quizá no tenga valor, pero mi miedo, es irme y no volver. Me tengo miedo.


1 comentario:

  1. el miedo no conduce al éxito asegurate de que no sea el autor en tu vida (: solo asi estaras mejor , besitos (:

    ResponderEliminar

suspiros

Licencia de Creative Commons
Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 España